El Foro de la Cultura recala en el Teatro Calderón con un mensaje rotundo contra el odio
El alcalde reivindica la convivencia, la información y el respeto a los demás
El alcalde reivindica la convivencia, la información y el respeto a los demás
El Teatro Calderón, el espacio señero por excelencia de la actividad cultural vallisoletana, ha sido hoy el escenario de la sexta edición del Foro de la Cultura que se viene celebrando desde el pasado miércoles en diversos escenarios de la ciudad.
Valladolid recibe por segunda vez un acontecimiento de la entidad del Foro de la Cultura. Un Foro que, a pesar de su juventud -solo ha celebrado seis ediciones, y una de ellas tuvo que ser on line a causa de la pandemia- se ha erigido ya como uno de los eventos culturales destacados que tienen lugar en la Comunidad Autónoma. Así lo reconoce el informe "Lo mejor de la cultura 2022", elaborado por el Observatorio de la Cultura, que sitúa esta actividad como la octava mejor propuesta cultural de Castilla y León. Ese puesto lo ha alcanzado tras escalar nueve posiciones en relación con la clasificación anterior, lo cual refleja el impulso dado a este encuentro con su primera celebración en Valladolid, en la que se ganó el respaldo del público, tal y como atestigua el hecho de que en la edición precedente contó con la asistencia de más de 10.000 personas a los actos programados.
El alcalde, Óscar Puente, acompañado por la concejala de Cultura, Ana Redondo, y la concejala de Medio Ambiente, María Sánchez, ha recordado que en ese ranking está liderado por la SEMINCI y que Valladolid forma parte de las ciudades españolas por la calidad e innovación de su oferta cultural.
El Foro de la Cultura, organizado por la empresa Cultura & Comunicación, cuenta con profundas raíces en Valladolid, ha sido reconocido también por el Ministerio de Cultura y Deporte como uno de los mejores proyectos de industrias culturales que han concurrido a la convocatoria de ayudas a lo largo de la última década. Así lo ha subrayado el alcalde: "Resulta evidente que este Foro se ha convertido en una manifestación cultural de especial relevancia, al que estamos encantados de acoger en nuestra ciudad. Y, por ello, vamos a continuar trabajando para que esta fructífera vinculación se mantenga durante muchas ediciones más".
En esta segunda ocasión que visita Valladolid, el Foro de la Cultura ha reunido un destacado elenco de ponentes, expertos en ámbitos como la filosofía, la neurología, el cine, la política, la literatura, el periodismo, la música, el humor o la justicia, que se repartirán en diversos encuentros en los que proporcionarán sus puntos de vista en torno a una cuestión que sigue muy vigente en nuestros días: el odio y sus diversas manifestaciones en la sociedad actual.
"Es cierto que al tratarse de un sentimiento pasional e irracional –ha reflexionado el alcalde- el odio es algo complejo y difícil de definir; si bien parece claro que comporta un conjunto de emociones negativas, como pueden ser la intolerancia, la animadversión y el desprecio. El odio, y su manifestación pública que es el discurso de odio, está presente en nuestra cotidianeidad de una manera más patente y acusada desde que se han popularizado las redes sociales. Y ello es así porque la misma tecnología que resulta beneficiosa para favorecer la comunicación y la extensión del conocimiento, permite también, a sensu contrario, dinámicas que expanden el odio; lo que se hace habitualmente amparándose en el anonimato o en perfiles falsos".
Óscar Puente ha detallado los distintos ámbitos del discurso del odio, que pone el foco, especialmente, sobre determinados colectivos en función de su color de piel, de su procedencia, de su género, de su ideología, de su orientación sexual o de su religión. Las redes sociales son el cauce que habitualmente utilizan la homofobia, la xenofobia, el machismo, la islamofobia, el antisemitismo y otras formas de intolerancia para insultar, humillar, acosar y amenazar, cuando no para incitar a la violencia.
"El discurso del odio no tiene cabida en sociedades democráticas, como la nuestra, que tiene a gala la protección de los derechos humanos y el rechazo a la discriminación de individuos o grupos por sus características inherentes. Favorecer la información veraz, la educación, el respeto a los demás y construir espacios de convivencia, son algunas de las principales herramientas que pueden ayudar a desterrar esa práctica denigrante."
Sobre estas y otras cuestiones relacionadas con el tema de esta edición del Foro han dialogado con serenidad y sosiego personas relevantes, como es el caso del prestigioso neurólogo, psiquiatra, psicoanalista y etólogo francés Boris Cyrulnik, que abrió el turno de intervenciones ante un auditorio expectante.