Descripción
El alcalde de Valladolid, Francisco Javier León de la Riva, y la concejala de Urbanismo, Cristina Vidal Fernández, han visitado esta mañana las obras de reforma y mejora de la calle Rosario Pereda, que comenzaron a finales del pasado mes de agosto y tienen un presupuesto de 575.714 euros, destinado fundamentalmente a renovar las redes de abastecimiento, saneamiento y alumbrado.
La obra, realizada por la empresa Hormigones Amo, se financia gracias al Fondo Estatal para el Empleo y Sostenibilidad Local 2010, y en ella trabajan un total de quince personas. El plazo de ejecución es de seis meses y los trabajos avanzan a muy buen ritmo, por lo que la conclusión de las obras -previsiblemente- se adelantará. De hecho, en estos días se está realizando la plantación del arbolado.
Entre las actuaciones ya efectuadas, hay que destacar la ejecución de una nueva red de abastecimiento (diámetro de cien milímetros), con renovación de las acometidas domiciliarias; la instalación de un sistema de riego por goteo para los alcorques, y una nueva red de saneamiento a lo largo de toda la vía con tubería de PVC (diámetro de cuatrocientos milímetros).
Estas mejoras se completan, como es habitual en las nuevas urbanizaciones, con la instalación de una infraestructura municipal compuesta por dos tubos de 160 milímetros de diámetro, que permitirá poner en servicio otras redes -telecomunicaciones, fibra óptica...- sin necesidad de abrir zanjas en la calle.
Respecto al alumbrado, se renueva su canalización mediante un tubo de 110 milímetros de diámetro por ambos lados de la calle, con la previsión de instalar nuevas columnas luminarias (trece, de ocho metros de altura), además de cuatro proyectores en los pasos de peatones, de acuerdo con el nuevo Reglamento de Eficiencia Energética. Todos ellos serán montados a lo largo del próximo mes de enero.
Plantación de 62 árboles y conservación de los plátanos
La configuración final de la calle, de 255 metros de longitud, quedará con una calzada de circulación para el tráfico rodado de 6,20 metros de anchura -dos carriles-, doble aparcamiento en batería de 4,50 metros de fondo, en tanto que las aceras tendrán una amplitud variable, con una media de 3,3 metros, con arbolado de nueva plantación (35 prunus y 27 liquidambar).
La pavimentación en las aceras consta de baldosa de hormigón de acabado pétreo de 30 x 30 centímetros, hasta sumar una superficie de casi 2.000 metros cuadrados. Por su parte, la zona de estacionamientos tendrá como firme adoquines de hormigón de 20 x 10, hasta alcanzar una extensión de casi 1.700 metros cuadrados. Los bordillos que flanquean las aceras son de granito.
Los cruces quedarán delimitados por vallas de encauzamiento de peatones, con dieciséis bancos y numerosas jardineras que serán instaladas en las próximas semanas. En esta semana se prevé la ejecución del aglomerado del tramo comprendido entre las calles Aurora y Luna, que quedará abierto al tráfico.
La obra, que ha permitido conservar los plátanos más antiguos que crecen junto al edificio de viviendas militares, también va a incluir la renovación de las redes de saneamiento y abastecimiento de la aledaña calle Luna.