Personal del Servicio de Limpieza y de Agualid lavó mediante agua a presión las calles, donde ningún usuario quedó sin suministro gracias al funcionamiento del anillo de mil milímetros
La zona de Pajarillos-San Isidro afectada ayer por la rotura de una tubería de suministro de agua potable localizada en las inmediaciones del Paseo Juan Carlos I recobró la normalidad durante la tarde, después de terminar las tareas de limpieza y lavado de las calles Trepador, Estornino, Oriol y Cigüeña, entre otras, llevadas a cabo de forma coordinada por personal de Agualid y del Servicio de Limpieza de la Concejalía de Desarrollo Sostenible.
La rotura de la tubería de 1.000 milímetros de diámetro, motivada probablemente por deficiencias en las juntas de los tubos de ese tramo, se produjo hacia las nueve de la mañana, lo que provocó la salida de un elevado caudal de agua hacia las calles mencionadas hasta que se pudieron cortar las válvulas en este punto, casi una hora después.
La incidencia no provocó el corte en el suministro de agua potable a los usuarios de la zona, ya que desde las estaciones de tratamiento de San Isidro y Las Eras se efectuó una redistribución de los caudales por la redes, gracias al cierre del anillo de 1.000 milímetros que conecta ambas estaciones mediante una conducción en ambos sentidos. A lo largo de hoy jueves y de mañana, Agualid procederá a la reparación de la avería.
En las labores para restablecer la normalidad en la zona afectada por la rotura de la tubería tomaron parte personal de Agualid y del Servicio de Limpieza. Los operarios de este último aplicaron agua a presión como método de lavado de calles, tanto en aceras como en calzadas y franjas de estacionamiento, con el fin de eliminar el barro arrastrado, en tanto que la empresa desplazó hasta el lugar máquinas, un camión y equipos impulsores-succionadores. Estas tareas concluyeron a primera hora de la tarde.
Para efectuar el lavado de las calles, fue necesario el desplazamiento de tres de los vehículos estacionados por parte de la grúa. Al tiempo, hay que hacer notar que el agua alcanzó algunos vehículos aparcados a ambos lados del Paseo Juan Carlos I, aunque no llegó a afectar a los motores.
Por su parte, el Paseo Juan Carlos I, que la Policía Municipal cerró al tráfico en ese tramo tan pronto como se produjo la fuga, quedó abierto a la circulación hacia las 20.30 horas de ayer.
