Descripción
"Queremos aprovechar este acto para dar las gracias al Ayuntamiento y también para rendir homenaje a Valladolid, ciudad abierta, ciudad de acogida". Las palabras de Luis Miguel de Dios en nombre de los periodistas de Valladolid han jalonado uno de los momentos más emotivos del acto celebrado en la Casa Consistorial, donde se ha presentado también el libro que recopila los escritos de Máximo Regidor, el decano de los profesionales de la información.
Junto a la presentación editorial se ha celebrado la recepción institucional, presidida por el alcalde, Óscar Puente, y el primer teniente de alcalde, Manuel Saravia, a periodistas y profesionales de la comunicación que trabajaron en el periodo de la "Transición" y la etapa de consolidación de la democracia (entre 1975 y 1992). Este tiempo coincide con la llegada de los grupos de comunicación al panorama informativo de la ciudad, con la negociación y venta de El Norte de Castilla al Grupo Correo, hace ahora 30 años.
El alcalde, Óscar Puente, ha expresado el agradecimiento de la Corporación -al homenaje han acudido varios concejales del Equipo de Gobierno formado por el PSOE y VTLP, y concejales del PP y Cs- por la contribución del periodismo vallisoletano al afianzamiento de la democracia: "Quiero empezar agradeciéndoos, de verdad, la confianza que nos habéis demostrado, confirmando vuestra asistencia con tantísima afabilidad. Teneros a todos aquí reunidos, en la Casa a la que habéis servido de altavoz y de emisarios durante tantos años, es todo un honor para mí y también, por qué no decirlo, un orgullo. Espero que disfrutéis de este reencuentro y que compartáis unas horas muy entrañables".
En reconocimiento a la excepcional labor periodística de los profesionales de aquellos años, cruciales para la historia del país y la ciudad, el Ayuntamiento de Valladolid ha querido reunir al mayor número posible de profesionales del período, cursando una invitación abierta e integradora a todas las personas adscritas a dichas circunstancias.
62 personas han asistido al encuentro. Profesionales de prensa escrita, radio, televisión y gabinetes institucionales y empresariales, que desempeñaron un papel esencial, a menudo silenciado por la vorágine del ritmo de los nuevos tiempos y la nueva era de la comunicación en nuestro entorno.
El Ayuntamiento de Valladolid concibe este acto como un reconocimiento a los hombres y las mujeres que, desde sus distintos cometidos y ámbitos informativos, mantuvieron abiertos y en perfecto funcionamiento los mecanismos de interlocución entre la sociedad y el nuevo aparato democrático, garantizando la libre circulación de la información, con unas cotas de libertad envidiables y llevados siempre por un profundo sentido de la responsabilidad.
"Siempre he pensado que la ciudad, que es lo que a mí me toca de cerca y que es mi principal afán en este momento de mi vida, la ciudad, "Valladolid", ha de vivirse y sentirse muy distinta en la piel del periodista. Incluso verse con otros ojos, con otra mirada. Y que, "nosotros" –quienes, desde el Ayuntamiento, tenemos la responsabilidad de gestionar, planificar, atender las necesidades de los vallisoletanos e impulsar la ciudad siempre hacia adelante, con solvencia y amor propio– y "vosotros", –los periodistas, los informadores, quienes hacéis que las cosas sucedan "en plenitud", porque lo que no es objeto de vuestra atención, a menudo sólo sucede "a medias"…– viajamos, "por el Pisuerga", en el mismo barco… Y lo que celebramos hoy es que esta travesía nuestra dura ya mucho mucho tiempo… Así que, ante todo, entended, por favor, este encuentro, como un acto de reconocimiento y gratitud del Ayuntamiento de Valladolid, por vuestra labor, una labor que debiera ser recordada y muy tenida en cuenta por el nuevo periodismo, con sus ritmos, sus objetivos, sus grandezas y también sus debilidades".
El Ayuntamiento de Valladolid es consciente de que "no están todos los que son". Algunos nos dejaron ya y otros no han podido acudir a la convocatoria por motivos personales; pero, en representación de todos ellos intervinieron en su nombre Carmen Domínguez y Luis Miguel de Dios, quien han coincidido en el carácter emotivo del acto al tiempo que han reiterado las palabras "gracias" al Ayuntamiento de Valladolid y a la ciudad. "Debemos aprovechar este acto para rendir homenaje a Valladolid, una ciudad abierta, una ciudad de acogida", ha señalado Luis Miguel de Dios, en referencia al trato hospitalario que recibe la gente que no ha nacido en Valladolid y que elige esta tierra para vivir.
Recopilatorio de la obra del decano de los periodistas vallisoletanos: Máximo Regidor, nacido en 1929
En el Salón de Recepciones también se ha presentado la una nueva edición municipal, titulada "Máximo Regidor. Literatura y crítica social más allá del periodismo", en edición de José Delfín Val Sánchez, periodista y cronista oficial de la ciudad. En este volumen, se incluyen diversos títulos creados de la pluma de Regidor entre 1960 y 1996; todos ellos testimonio elocuente del compromiso del autor con los temas sociales candentes en la España de aquellos años. Su hija, Carolina, que ha acompañado a su madre, Charo, ha transmitido el "orgullo" de Máximo Regidor y ha agradecido en su nombre la iniciativa del Ayuntamiento de Valladolid que con este recopilatorio pone el colofón a su carrera como escritor.
El periodista Máximo Regidor nació en Valladolid en 1929 es en la actualidad el último representante de toda una generación de "periodistas de raza", periodistas de la "vieja guardia", protagonistas de la antigua forma de "hacer periodismo" en "provincias", que terminaría con la llegada de los grupos de comunicación y la implementación de internet.
El estudio que introduce la antología está firmado por José Delfín Val y lleva por título "Siempre Máximo, nunca mínimo". En él se da cuenta de la intensa y prolongada en el tiempo producción literaria de Máximo Regidor, materializada en decenas de cuentos y novelas cortas disgregadas en ediciones hoy en día muy difíciles de localizar; y muchas de ellas incluidas en antologías o publicaciones periódicas.
Máximo Regidor se dio a conocer como escritor con la novela "El pan muerto", que fue galardonada con el Premio de Novela Corta del Ateneo de Valladolid en 1961. Con su segunda novela, Regidor sería merecedor del Premio Guipúzcoa en 1962; su título: "No dejarse morir". En el 66 obtendría el Premio "Jauja", con "No tenemos sitio para caminar". Además de estos títulos, la antología que ve la luz recoge doce cuentos del autor, todo ellos muy intensos, que constituyen una fotografía fidedigna de distintos tipos y paisajes de la posguerra española, con sus circunstancias y situaciones tremendas, y su espíritu de supervivencia en cada línea.
Tanto las novelas como los cuentos incluidos en la antología, conservan sus portadas originales y sus ilustraciones; en su mayoría cedidas generosamente por los herederos de Cuadrado Lomas, gran amigo y colaborador de Máximo Regidor. El diseño y la maquetación es obra de Óscar del Amo. El libro se ha incluido en la Colección de Autores Vallisoletanos, Serie "Contemporáneos" del catálogo de publicaciones del Ayuntamiento de Valladolid; y se encuentra ya en librerías a disposición del público.
Al final del acto todos los asistentes han recibido un obsequio personalizado de manos de Óscar Puente y Manuel Saravia, en recuerdo de este singular reencuentro promovido por el Ayuntamiento de Valladolid.