Descripción
El Ayuntamiento de Valladolid, la Obra Social "la Caixa", Cáritas y la Casa de la Juventud Aleste han renovado el convenio para poder dar continuidad al programa "Delicias", un proyecto socioeducativo dirigido a los más jóvenes de ese populoso barrio.
El convenio entre la Obra Social "la Caixa", como entidad financiadora, el Ayuntamiento como impulsor y coordinador, y Cáritas y Casa de la Juventud "Aleste" como entidades, se está desarrollando sobre el terreno y supone un importante apoyo para la intervención social con los menores y jóvenes de esta zona, complementario al trabajo de los servicios sociales municipales.
Estos proyectos marcan una forma adicional de abordar la intervención comunitaria donde se entrelaza la iniciativa privada, el trabajo y conocimiento de las entidades y asociaciones de la zona, y el liderazgo y coordinación de las instituciones públicas.
El convenio surgió por el especial interés de la administración local en el desarrollo de proyectos sociales para la integración de menores y jóvenes de especial vulnerabilidad, por la complementariedad que suponen para una intervención integral con las familias de estas zonas especialmente necesitadas.
Además, el desarrollo de estos proyectos por parte de entidades que trabajan en el terreno y con los sectores de población señalados ha sido fundamental para el éxito del programa gracias a la cercanía en la intervención.
El alcalde de Valladolid, Oscar Puente, agradeció a la Fundación "la Caixa" "su compromiso con Valladolid y con las personas que viven situaciones de vulnerabilidad" implicándose económicamente en la cofinanciación del proyecto.
La Obra Social "la Caixa" aporta este año 35.000 euros para financiar la gestión del programa por parte de las dos entidades sociales, lo que supone una cantidad global que alcanza los 85.000 euros y que se verá reforzada con los 15.000 euros que aporta el Ayuntamiento de Valladolid, lo que suma la cifra global de 100.000 euros.
Puente recordó que Delicias es "uno de los barrios más populosos y queridos de la ciudad que ha sufrido, como pocos, las secuelas de una profunda crisis económica, de empleo" que ha afectado especialmente a los jóvenes y menores, muchos de los cuales han abandonado los estudios y no siguen una formación complementaria, "pasando mucho tiempo de ocio no dirigido" que en ocasiones transforma la convivencia intercultural e inter-étnica, "que debiera de ser enriquecedora y movilizadora, en tensión e inseguridad ciudadana".
El convenio promueve, precisamente, la búsqueda de soluciones a estas situaciones, amparando dos proyectos que tienen como objetivo, por un lado, gracias a la colaboración de la Casa de Juventud Aleste, el apoyo a la educación, animación sociocultural, promoción y autonomía de los jóvenes y personas adultas, complementando el trabajo de los servicios sociales municipales, y, por otro, el trabajo de educación de calle y de ocio dirigido, desde la Parroquia de Santo Toribio, que apoya y complementa la labor que se lleva desarrollando desde hace muchos años en el barrio.
Buenos resultados
Durante el curso 2016-2017, cuando se puso en marcha este convenio, en el proyecto realizado por la Casa de Juventud Aleste se ha trabajado habitualmente con 60 menores de entre 7 y 14 años distribuidos en cuatro grupos de edad y con 14 adultos en un grupo de trabajo. La evaluación de satisfacción y de logro realizada con todos los grupos muestra muy buenos resultados.
En la intervención que se está desarrollando en el presente curso y que ampara este convenio se está trabajando con un grupo similar de menores, en torno a 55, con un reajuste de las edades de los grupos para acomodar y facilitar los aprendizajes. El grupo de adultos trabaja con doce participantes en la mejora de las competencias sociales básicas y habilidades y en la empleabilidad
En el proyecto de Caritas que se desarrolla desde la Parroquia de Santo Toribio, además de complementar con algunos recursos la actividad del trabajo con menores y jóvenes que se venía desarrollando, se ha apoyado fundamentalmente la creación y mantenimiento de un grupo de jóvenes de etnia gitana en situación de riesgo de exclusión para los que, a través del deporte, concretamente del futbol sala, se han buscado itinerarios de integración.