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El alcalde y el concejal de Movilidad mantuvieron encuentros de trabajo con empresa y trabajadores de AUVASA en la primera visita que realiza un alcalde a sus instalaciones en los últimos 20 años

El alcalde de Valladolid, Oscar Puente, apuntó este viernes como objetivo del equipo de Gobierno la supresión de "todo tipo de tráficos", público y privado, en la Plaza Mayor para convertirla en "cien por cien peatonal", y espera poder sacar las líneas de autobús que la cruzan antes de fin de año por otro itinerario, así como acometer el traslado de los accesos al parking en 2017.

En concreto, el alcalde sugirió la idea de cerrar al transporte público la Plaza a partir de la Semana de la Movilidad, en septiembre, -después de las Ferias y Fiestas de la Virgen de San Lorenzo-, e iniciar lo antes posible los estudios sobre la obra que se necesitaría afrontar para sacar de la Plaza los accesos al parking, de modo que aquella pudiera comenzar el año que viene.

En su opinión, sacar los autobuses de la Plaza Mayor y mantener en superficie el vehículo privado, "no tiene mucho sentido", de forma que la propuesta es comenzar por lo más sencillo y sacar a licitación el proyecto de obra del parking dentro de este año, para poder presupuestarlo "inmediatamente después".

El alcalde y el concejal de Seguridad y Movilidad, Luis Vélez, acompañados del director del Área, Javier Rodríguez Bustos y el jefe de Movilidad, Roberto Riol, mantuvieron una intensa reunión de trabajo con Begoña Estébanez y Santiago Warncke, gerente y director técnico respectivamente, de la empresa, así como técnicos y representantes de los trabajadores, con los que se acometieron multitud de temas de interés respecto al futuro del transporte público.

Según explicó el regidor al término de ambos encuentros, las reuniones se centraron en la remodelación del servicio, en busca de la mejora de su velocidad comercial, adaptación de tarifas en función de las necesidades de la sociedad y la incidencia del Plan Integral de Movilidad Urbana Seguro y Sostenible (PIMUSSVA) en la modificación de las actuales líneas de autobús.

Se trata, dijo, de convertir a AUVASA en una propuesta "más sexy", que atraiga a los ciudadanos, prestando mejor servicio, y en ese sentido, señaló que durante la reunión se trató también la revisión de la política de tarifas, probablemente incrementando el coste del billete sencillo para primar, a través de la tarjeta de transporte y otros nuevas modalidades de pago "más adaptadas a la realidad de nuestra sociedad y más flexibles", a quienes hacen del transporte público su forma de movilidad principal.

De igual modo, avanzó la probable puesta en marcha de un "bono social" que beneficie, en cuanto a precios, a personas en desempleo, que vienen años reclamando medidas de este tipo, si bien no quiso ahondar en detalles, puesto que las novedades en este asunto aún están sin cerrar.