Fecha de la noticia
18 de julio de 2013
Descripción
El Ayuntamiento de Valladolid se suma al DÍA INTERNACIONAL NELSON MANDELA, que se celebra en todo el mundo hoy jueves, 18 de julio, con la celebración en la Sala Municipal de Exposiciones del Museo de Pasión de un taller gratuito para todos los niños y niñas de 4 a 12 años que quieran asistir a esta celebración.
En el taller -que lleva como título 67 MINUTOS CON NELSON MANDELA- los participantes conocerán la figura de Nelson Mandela a través del relato de su historia y sus logros. Durante 67 años Nelson Mandela dedicó su vida al servicio de la humanidad, trabajando por la paz, solución de conflictos, las relaciones interraciales, la promoción y protección de los derechos humanos, la igualdad entre los géneros, los derechos de los niños y la promoción de una cultura de paz en todo el mundo.
El 18 de julio es el Día Internacional de Nelson Mandela, la ONU promueve una iniciativa mundial para dedicar 67 minutos de nuestro tiempo a ayudar a los demás, homenajeando a Nelson Mandela en su día. En noviembre de 2009, la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 18 de julio «Día Internacional de Nelson Mandela» en reconocimiento de la contribución aportada por el ex Presidente de Sudáfrica a la cultura de la paz y la libertad.
En la resolución 64/13 de la Asamblea General se reconocen los valores de Nelson Mandela y su dedicación al servicio de la humanidad a través de su labor humanitaria en los ámbitos de la solución de conflictos, las relaciones interraciales, la promoción y protección de los derechos humanos, la reconciliación, la igualdad entre los géneros, los derechos de los niños y otros grupos vulnerables, y la defensa de las comunidades pobres y subdesarrolladas. Se reconoce también su contribución a la lucha por la democracia a nivel internacional y a la promoción de una cultura de paz en todo el mundo.
EL TALLER
Durante 67 años Nelson Mandela dedicó su vida al servicio de la humanidad, trabajando por la paz, solución de conflictos, las relaciones interraciales, la promoción y protección de los derechos humanos, la igualdad entre los géneros, los derechos de los niños y la promoción de una cultura de paz en todo el mundo.
A través de una actividad plástica se concienciará a los niños sobre las distintas razas y culturas de nuestro planeta, sobre la importancia de la responsabilidad de ser un buen líder para gobernar un país.
Este taller organizado desde la Fundación Municipal de Cultura, tienen una duración de 67 minutos. El taller está pensado para promover un aprendizaje significativo, así como para conocer aspectos artísticos y culturales A partir del visionado de varias imágenes relacionadas con la idea genérica de entender la diferencia de culturas como un total de la humanidad, se dialoga sobre temas específicos, fomentando la expresión oral y la reflexión de todos los participantes. Finalmente se realizarán actividades de creación plástica de forma individual o en equipo que sirva para aprender mediante experiencias prácticas los conceptos tratados. Para terminar el taller los niños/as tendrán la oportunidad de explicar detalladamente a sus compañeros lo que han realizado, conversando entre ellos sobre lo aprendido y sacando sus propias conclusiones.
LA EMBAJADORA DE SUDÁFRICA EN ESPAÑA ESTARÁ PRESENTE DURANTE LA CELEBRACIÓN DEL TALLER
La Embajadora de Sudáfrica en España. Fikile Magubane, se desplazará a Valladolid y asistirá a este taller. Embaja
Imagen en alta resolución. Este enlace se abrirá mediante lightbox, puede haber un cambio de contextodora extraordinaria y plenipotenciaria de Sudáfrica en España desde hace casi tres años, nació en Soweto, en Johanesburgo, y está licenciada en Economía y Contabilidad por la Universidad de Botswana, Lesotho y Swazilandia. En 1994 obtuvo un máster en administración pública en la Universidad de Harvard. En 2003 recibió el reconocimiento de su Gobierno por su contribución a la creación de la Asociación de Bancos de África Central. En 2005 se convirtió en cónsul en Nueva York y Madrid es su destino desde 2010.
NELSON MANDELA
No ha existido en la política de nuestro tiempo una figura más popular, admirada y universalmente respetada que el sudafricano Nelson Mandela, icono de la lucha contra el apartheid, al que derrotó, antiguo líder del Congreso Nacional Africano, primer presidente negro de su país y Premio Nobel de la Paz.
Su liberación en 1990 tras 27 años de cautiverio dio inicio, trabajando estrechamente con el presidente reformista Frederik de Klerk, a una complicada pero finalmente exitosa transición desde la dictadura segregacionista blanca hasta la democracia multirracial, que alumbraron unas elecciones libres ganadas por el ANC, un Gobierno de unidad y una nueva Constitución. Pese al rencor acumulado tras tantos años de represión y a los estallidos de violencia que jalonaron el delicado proceso, Mandela, paradigma de integridad, nunca se cansó de instar a la paz civil y a la reconciliación de los sudafricanos. Su obsesión fue conseguir y preservar la unidad de la "nación arco iris".
Durante su mandato presidencial, entre 1994 y 1999, Mandela, con su extraordinario carisma, su rechazo a las medidas radicales y su elevado sentido de la responsabilidad, fijó los pilares políticos y económicos de la nueva Sudáfrica, y medió en los conflictos del continente, pero dejó sin resolver graves déficits sociales. Tras jubilarse de la política y pese a su avanzada edad, el mitificado dirigente, llamado Madiba por sus paisanos, continuó activo en una serie de causas humanitarias hasta que su paulatino apagamiento físico le apartó de la vida pública, aunque no de los pensamientos y los corazones de su agradecido pueblo. En junio de 2013, una grave infección respiratoria le ha colocado a las puertas de la muerte próximo a cumplir los 95 años.
Rolihlahla Mandela nació el 18 de julio de 1918 en Mvezo, un poblado de 300 habitantes en la Unión de Sudáfrica. Pertenecía al clan Madiba de la etnia xhosa y fue uno de los 13 hijos que tuvo su padre Henry Mgadla Mandela, con sus cuatro esposas; a su vez, era nieto de del rey Ngubengcuka, que falleció en el año 1832. Su madre Nonqaphi Nosekeni, fue la tercera esposa de su padre.
Después de la muerte de su padre en 1927, el joven Rolihlahla se convirtió en el pupilo de Jongintaba Dalindyebo, el Jefe Supremo del clan, para ser preparado para asumir un alto cargo, ahí al escuchar las historias de sus antepasados durante las guerras de resistencia, soñó con hacer su propia contribución a la lucha por la libertad de su pueblo.
Recibió la educación primaria en una escuela de la misión local y posteriormente asistió al Clarkebury Boarding Institute y finalizó sus estudios de secundaria en la escuela Healdtown, en Wesleyan. En 1937, se inscribió en la licenciatura en artes de la Universidad de Fort Hare, donde fue seleccionado como representante del consejo estudiantil, aunque en 1940 fue expulsado por participar en acciones de protesta, junto con Oliver Tambo.
En 1941, huyó con su primo Justice a Johannesburgo para evitar un matrimonio arreglado, ahí trabajo por corto tiempo como vigilante de una mina, hasta que conoció a Walter Sisulu, quien lo invito a colaborar en el bufete de abogados Witkin, Sidelsky & Eidelman.
En 1942 finalizó sus estudios de arte en la Universidad de Sudáfrica (Unisa), para posteriormente iniciar la licenciatura en derecho en la Universidad de Wits. Entró a la política mientras cursaba sus estudios y en 1943 se unió al Congreso Nacional Africano (ANC).
Durante el apogeo de la Segunda Guerra Mundial, en 1944, bajo el liderazgo de Anton Lembede, Madela junto con William Nkomo, Sisulu, Oliver R Tambo, Ashby P Mda y otros 60 miembros, se dieron a la tarea de transformar el ANC en un movimiento de masas radical, fundando la Liga Juvenil del Congreso Nacional Africano, donde es electo secretario nacional en 1948 y presidente en 1951.
En 1952 comienza la Campaña de Desafío a las Leyes Injustas y es arrestado por primera vez, acusado de violar la Ley de Supresión del Comunismo. En agosto de ese año, en asociación con Oliver Tambo, abrió el primer bufete de abogados negros en Sudáfrica, aunque su nuevo estatus profesional no le brindo ningún tipo inmunidad a las brutales leyes del apartheid.
Su lucha continuó durante toda la década de los cincuentas, sufriendo varios tipos de represión y siendo detenido y encarcelado múltiples veces. En 1962 salió de su país bajo el nombre de "David Motsamayi" y se dirigió a la Conferencia del Movimiento de Libertad Panafricano del este y oeste de África, viajando también por distintos países como Tanganyika, Senegal, Ghana y Sierra Leona, quedándose por un tiempo en Londres.
A su regreso a Sudáfrica, fue arrestado y acusado de salir ilegalmente del país. Mandela decidió defenderse el mismo, convirtiendo su declaración en la corte durante el juicio, un momento histórico de la resistencia al apartheid, siendo una inspiración para todos los que se han opuesto a ella.
El 12 de junio de 1964, fue declarado culpable y condenado a cadena perpetua. Sus años en prisión, que sumaron poco más de 27, estuvieron marcados de pequeños y grandes eventos que jugaron un papel crucial en la formación de la personalidad y actitud del hombre que finalmente, en 1994, se convertiría en el primer presidente negro de Sudáfrica, tras ganar las primeras elecciones multirraciales del país.
El exmandatario dedicó 67 años de su vida a luchar contra el régimen del apartheid. Su mensaje de reconciliación y convivencia entre razas, hizo posible la transición hacia una Sudáfrica democrática que le valió el premio Nobel de la Paz en 1993, que recibió junto al entonces presidente sudafricano, Frederik Willem de Klerk.