Descripción
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Valladolid, reunida esta mañana en sesión ordinaria bajo la presidencia del alcalde, Francisco Javier León de la Riva, ha abordado los asuntos que figuran a continuación dentro del orden del día.
En el Área de Urbanismo y Vivienda, el órgano de gobierno ha concedido la licencia de primera ocupación a dos viviendas unifamiliares construidas en el plan parcial La Galera. Igual permiso se ha concedido para un edificio de uso religioso en la calle Ignacio Serrano, que será regentado por los Testigos de Jehová.
Respecto a los asuntos de Planificación e Infraestructuras, se ha dado el visto bueno inicial al Estudio de Detalle para regular la instalación de ascensores en la manzana delimitada por las calles Narciso Alonso Cortés, 7 y 9, y la calle Juan de Ribero 2 y 4 (Cuatro de Marzo).
Este acuerdo persigue mejorar el acceso a los últimos pisos (cuatro alturas) para una población de un barrio mayoritariamente envejecida, así como adecuar la instalación de los ascensores a la composición de las fachadas existentes, de manera que no suponga ruptura con las mismas, sin perjudicar la entrada de luz natural a las viviendas. Así, los elevadores tendrán cristales traslucidos y permitirán el tránsito normal de los peatones.
Convenio de colaboración con las Adoratrices
En materia de Bienestar Social, conviene destacar la prórroga hasta diciembre de 2011 del convenio de colaboración con las Hermanas Adoratrices del Santísimo Sacramento para la atención a mujeres víctimas de violencia de género, que conlleva un gasto de 6.800 euros anuales con cargo a los presupuestos de 2010 y 2011.
El convenio fue suscrito en febrero de 2008 para proporcionar asistencia y apoyo a estas mujeres y sus hijos en viviendas tuteladas una vez que han abandonado la casa de acogida. Hay dos viviendas unifamiliares gestionadas mediante este convenio, en las que viven tres mujeres y una hija no emancipada de una de ellas.
La Congregación de Religiosas Adoratrices del Santísimo Sacramento fue fundada por Santa María Micaela a mediados del siglo XIX para promover la educación de jóvenes que se dedicaban a la prostitución, con el fin de abandonar esta actividad y procurarles una alternativa sociolaboral. La orden ha ido evolucionando conforme a las demandas sociales y ahora mismo desarrolla numerosas actividades de apoyo y promoción de la mujer, prestando especial atención a los casos de violencia de género.
Igualmente, en esta Área se ha aprobado las bases y convocatoria del XIII Certamen de Relatos Breves escritos por mujeres, con la finalidad de potenciar la creación literaria de las mujeres como forma de participación en la cultura, entendida a su vez como una vía para progresar en la igualdad entre hombres y mujeres. Para dotar económicamente el premio, se autoriza un gasto de 900 euros en el presupuesto de 2011.